Subrogación de Jardineros

Este post de Poda y Jardín lo escribo con espíritu constructivo, no quiero crear porlémica y como en todo en la vida, existen muchos y diferentes puntos de vista. Yo desde mi respeto por la profesión de Jardinero, voy a daros mi humilde punto de vista sobre la

Subrogación de Jardineros

Mi experiencia en lo que a subrogación se refiere es mala, muy mala. Lo puedo decir tras muchos años en el mundo laboral y en concreto mi experiencia dentro de los convenios jardinería y la de colegas míos que se dedican al sector de la limpieza con un convenio muy similar al que estamos sujetas las empresas de jardinería.

 Por norma general, un cliente es fiel a su jardinero o empresa de jardinería habitual, sólo se plantea el cambio cuando no está satisfecho con el servicio y esto sucede cuando el jardín no está bien mantenido. Es entonces cuando el cliente por lo general basatnte cansado después de haber dado varios toques de advertencia al jardinero, se pone a la búsqueda de nuevas empresas que puedan tener su jardín como cree que se merece. Dicho esto, el cliente siempre tiene la razón, está en su perfecto derecho de exigir el perfecto mantenimiento de su jardín acorde con las horas de dedicación de un jardinero que tiene contratadas.

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Otro caso bien distinto es el de las grandes contratas de jardinería como por ejemplo Cespa que están sujetas a contratos públicos mayoritariamente. En estos casos la subrogación de jardineros es completamente normal y habitual, las contratas van rotando y los jardineros permanecen. En estos casos, la subrogación tiene todo el sentido para proteger a los trabajadores, pero estamos hablando de casos de subrogación en la pequeña y mediana empresa de jardinería.

 Cansado el cliente del mal estado de su jardín…

 Entonces llegamos las nuevas empresas, que nos hacemos visibles con mucho esfuerzo y dinero invertido para que nos contacten, queremos nuevos clientes, nos gusta nuestro trabajo y lo damos todo para captar y retener a nuestros clientes.

 Nos cuesta muchísimo trabajo conseguir un nuevo cliente a las empresas de jardinería y en general a todas las empresas. Por lo general tenemos que hacer una oferta muy competitiva, lo que se dice vulgarmente, «tirar el precio» y además ofrecer una serie de pluses al cliente para hacerte merecedor de su confianza.

El cliente al final se decide por una nueva empresa y justo cuando le informa a la empresa de jardinería saliente ésta tiene dos opciones:

  1.  El Jardinero es muy competente: se lo lleva a otro cliente porque tener un buen jardinero es un tesoro que hay que cuidar. Por lo general esto es lo que no sucede en casos de subrogación
  2. El Jardinero no es bueno en su trabajo o la empresa no ha sido capaz de formar a su jardinero y de supervisar su trabajo (culpa de la empresa y del jardinero). Entonces la empresa ve una oportunidad de oro para desprenderse de un trabajador que no quiere porque retenerle en su organización supondría un lastre con el que no quiere cargar, además no querrá costear el despido del trabajador.
Entonces el cliente llama a la nueva empresa y le dice que se tiene que subrogar en el trabajador que tenía, precisamente aquel que tenía el jardín mal mantenido, pero claro, no lo quiere trabajando allí, entonces le dice a la nueva empresa que no lo quiere allí y la nueva empresa tiene que asumir el despido de este trabajador.

La nueva empresa dice que su oferta sólo es válida con su propio personal pero la Ley es la que manda, así que la nueva empresa renuncia al contrato con el cliente y éste acaba quedándose con la empresa incompetente o la nueva empresa se la juega y trata de reconducir el jardín con el jardinero existente empleando muchos más recursos en supervisar el jardín para que el cliente no le ponga la cara roja.

¿Justo?

te invito a comentarlo más abajo siempre desde el respeto.

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